¿Es Necesario el Bautismo para Salvación?

Por:Walter Dardón.

¿Qué papel juega el bautismo en la salvación de un individuo? Es una muy buena pregunta. En nuestro mundo religioso actual, muchos enseñan que el bautismo no es esencial para la salvación, ellos dicen que usted simplemente debe hacer una oración [la oración del pecador] para que reciba la salvación que Dios promete. 

Para ellos el bautismo solamente es “una muestra exterior de su fe” por lo tanto, El propósito del bautismo es: “mostrar la salvación, no procurarla…Estos grupos profesan que la salvación es por fe solamente, niegan que el bautismo (inmersión en agua) juegue algún papel importante en la salvación de los individuos. Pero ¿Qué dice la Biblia acerca del bautismo en agua?

A través del Nuevo Testamento vemos la importancia de este mandamiento [bautismo]. Jesús lo ordenó en la gran comisión dada a los apóstoles: “El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado” Marcos 16:16  Naturalmente nadie que no cree en Jesús, accederá a obedecer lo que él pide que haga para su salvación. Al igual que en Marcos, Mateo (28:18-20)  registro que aquellos que obedecerían el evangelio, debían ser bautizados.

Note lo que dice la Palabra de Dios acerca del bautismo: Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo. Hechos 2:38 La frase “para perdón de los pecados” está relacionada con “Arrepentíos” y con “bautícese”. El propósito que se relaciona con el arrepentimiento, también se relaciona con el bautismo. Si ellos debían arrepentirse para que sus pecados fueran perdonados, también debían bautizarse para que sus pecados fueran perdonados. Más adelante en una de sus cartas a la iglesia el mismo apóstol Pedro dijo lo siguiente: El bautismo que corresponde a esto ahora nos salva (no quitando las inmundicias de la carne, sino como la aspiración de una buena conciencia hacia Dios) por la resurrección de Jesucristo 1°Pedro 3:21.

El apóstol Pablo al relatar su conversión dijo: Ahora, pues, ¿por qué te detienes? Levántate y bautízate, y lava tus pecados, invocando su nombre. Hechos 22:16 La expresión, "lava tus pecados", contiene sin duda una referencia al perdón que ocurre en el bautismo, y la metáfora de lavar ("apolousai") la sugiere el lavamiento del cuerpo que se hace en el bautismo. Habría de lavar sus pecados sometiéndose al lavamiento en el que Dios los perdona. Todo esto habría de hacer "invocando su nombre", porque es por el nombre de Jesús que ahora recibimos toda bendición, y especialmente el perdón de los pecados.

La mayoría de los escritos del Nuevo Testamento fueron traídos por Dios a través de Pablo, y él hablo mucho acerca del bautismo. Una de las cosas que Pablo escribió sobre el bautismo fue lo siguiente: “porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos” Gálatas 3:27 Aquí Pablo presentó el bautismo, como el momento, cuando a través de la fe, uno se convierte en un hijo de Dios, revestido de Cristo. Es inaceptable decir, que el bautismo no está ligado a nuestra salvación. Nadie antes de ser bautizado puede estar revestido de Cristo.

¿Cómo Dios llama a las personas para salvación?
2° Tesalonicenses 2:13-14 (Por: Evangelista Walter Dardón)

Esta es una muy buena pregunta, ¿Cómo Dios llama a las personas? En el mundo religioso de hoy existen muchas ideas diferentes acerca de cómo Dios llama a un individuo para salvación. Existen aquellos que dicen que Dios les ha hablado directamente a través de una vocecita. Otros sin embargo dicen que Cristo llego a ellos por medio de una visión, un sueño, un sentimiento o una experiencia especial. Pero ¿Enseña la Biblia esto? ¿Qué dice la Biblia acerca de cómo Dios llama a las personas? Investiguemos pues este importante tema.

No cabe duda que Dios nos ama y que él quiere comunicarse con nosotros. Si Dios quiere que le conozcamos, ¿cómo es que lo hace? La primera cosa que necesitamos averiguar es: ¿Cómo Dios se comunica hoy con nosotros? La Biblia nos dice que en tiempos antiguos, Dios interactuaba de una manera directa con el hombre. Hombres como Adán, Caín, Abel, Abraham, Moisés, Samuel, Jeremías, Noé etc. Al ir a Hebreos 1:1-2 leemos: “Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas…” al contemplar la primera parte de nuestra cita, vemos que claramente Dios sí  uso diferentes formas para comunicarse con el hombre. Dios hablo por medio de sueños, a través de una zarza ardiendo, y también de manera directa. “…en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo”. Según la segunda parte de nuestra cita, Dios sigue hablando hoy pero solo de una manera, esta es a través de su Hijo. Esto también se señala en Mateo 17:5 en la transfiguración de Jesús: “Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia; a él oíd.”

Amado lector, Dios nos sigue hablando hoy a usted y a mí solo por medio de Jesús, la pregunta es: ¿Cómo lo hace? ¿Cómo Jesús me habla? El apóstol Pablo nos explica como esto sucede: “ Pero nosotros debemos dar siempre gracias a Dios respecto a vosotros, hermanos amados por el Señor, de que Dios os haya escogido desde el principio para salvación, mediante la santificación por el Espíritu y la fe en la verdad, a lo cual os llamó mediante nuestro evangelio, para alcanzar la gloria de nuestro Señor Jesucristo” (2° Tesalonicenses 2:13-14). Pablo dice, que somos llamados por medio su evangelio (lo que él predicaba, Cp. 1° Corintios 15:1-5) en el cual somos santificados por el Espíritu y la fe en la verdad, Cp. Juan 17:17. 

Podemos oír las palabra de Jesús a través del Nuevo Testamento “El que me rechaza, y no recibe mis palabras, tiene quien le juzgue; la palabra que he hablado, ella le juzgará en el día postrero” (Juan 12:48).

En  el Nuevo Testamento encontramos todo lo que necesitamos saber de Jesús para creer en él “Hizo además Jesús muchas otras señales en presencia de sus discípulos, las cuales no están escritas en este libro. Pero estas se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre” (Juan 20:30,31).

Al oír la Palabra es como viene la fe: “Así que la fe es por el oír, y el oír, por la Palabra de Dios” (Romanos 10:17). Así es cómo Dios nos sigue hablando hoy. Dios habla hoy, por medio del evangelio. Solo por medio la predicación del evangelio es como escuchamos la voz del Señor, y es como Dios nos llama a salvación.

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